Como manejar la infidelidad?

“Cuando es duro aceptar la realidad”, 
 ¿Cómo manejar la infidelidad? para no caer en la violencia
La Doctora Mónica Levi en su libro “un nuevo comienzo reencontrando el amor” menciona cuando una relación no va bien, es señal de que existen dos responsables:
El que falta el respeto y el que lo permite
El que no oye y el que no se hace oír
El que invade y el que permite ser invadido
El que manipula y el que se deja manipular
El que no es bueno en la cama y el que no hace nada para modificar la situación
El que comienza la pelea y el que se deja atrapar en ella.
Cuando en una relación “algo no va bien” la otra parte “lo sabe”. Lo que sucede es que “prefiere no darse cuenta”. En la psicología no hay víctimas, victimas hay en la farándula y en las páginas policiales de los periódicos. Lo cierto es que en PSICOLOGIA NO HAY VICTIMAS.
Pues aquí una primera recomendación, es importante reconocer que el victimario eligió de esposa a la víctima o la victimaria eligió de esposo al víctima.
La infidelidad no se maneja, las personas que han pasado o pasan por esta situación deben de preguntarse, que he hecho yo para elegir justo a la persona con la que elegí compartir mi vida, que ella o el me sea infiel, esto no es casual, hay toda una experiencia familiar, de pareja (los padres como modelos) y hasta social.
Por tanto, aunque suene crudo, el “tengo mala suerte en el amor” eso no existe en la psicología, es elegí una pareja para ser infeliz o para que me engañe o para decir que tengo mala suerte o para terminar solo o sola. Y a veces lo que es peor, para ser la victima de los hijos o hijas y que “ellos sean testigos de lo maldito que fue su padre” o “la maldita que fue su madre”. Según sea el caso.
La persona que violenta y mata o asesina a su pareja o cónyuge, simple y llanamente llegó a la cúspide de la infelicidad total, y ahora “tiene todos los argumentos inconscientes para justificar ese asesinato”. “Hasta pareciera que todo el universo conspiro para que la mate”. Y es cierto, dentro de su mundo (ese mundo inconsciente tiene todas las razones), obviamente inadecuadas, pero para él o ella justificadas para matarlo o matarla.
Muchas veces, un acto violento no solo está cargado de Cólera, sino que está acompañado de otras emociones como la tristeza y a veces del miedo. Justamente, ése es uno de los puntos importantes para que los actos violentos disminuyan. El aprender a diferenciar que emoción o emociones se está sintiendo en el momento en que ocurre un “acto que sentimos que nos invade”. En un acto de infidelidad por ejemplo, la otra parte “la parte engañada” siente miedo, tristeza y cólera. Y de acuerdo a su aprendizaje familiar sólo se permitirá sentir alguna de las tres, lo óptimo es que pueda percibir que siente las tres y de seguro su reacción será totalmente diferente.

*Psicoterapeuta Certificado en Análisis

 Transaccional

Especialista en Comportamiento y Desarrollo Organizacional.
Coach Certificado / Consultor